En la industria de transformación del metal, los humos, gases nocivos y partículas generados durante las operaciones de soldadura ponen en grave peligro la salud de los trabajadores y el entorno de producción. Para hacer frente a este reto, han surgido los extractores de humos de soldadura y se han desarrollado diversos métodos de captura de polvo. Hoy hablaremos de por qué el control en origen de los humos de soldadura es crucial para la seguridad de los soldadores.

La captura en origen es la medida más eficaz para proteger a los soldadores de los humos nocivos, y su importancia se refleja en los puntos siguientes:
Eliminación del riesgo de inhalación de carcinógenos del grupo 1 de la IARC: Se ha demostrado que los humos de soldadura son carcinógenos humanos. La tecnología de captura en origen elimina el cromo hexavalente (Cr⁶⁺), los compuestos de níquel, el cadmio y el arsénico antes de su inhalación, lo que reduce significativamente el riesgo de cáncer de pulmón.
Prevención de la intoxicación sistémica: Capturar los vapores de manganeso inmediatamente después de su generación evita daños neurológicos irreversibles ("intoxicación por manganeso"/síndrome de Parkinson) y los peligros de metales neurotóxicos como el plomo. Interceptar el cadmio (que causa daños renales/pulmonares) y los fluoruros (que causan irritación respiratoria grave/problemas óseos) de los revestimientos de los electrodos.
Prevención de la fiebre por humos metálicos: Eliminación de altas concentraciones de óxido de zinc, cobre o magnesio recién formado, que puede causar enfermedades agudas similares a la gripe.
Ventilación por dilución: La ventilación ambiental ordinaria sólo puede diluir los humos, no eliminarlos. Los soldadores siguen teniendo que respirar aire contaminado cerca del arco. La tecnología de captura en origen puede eliminar más de 90% de sustancias peligrosas directamente en el punto de origen.
EPI (Respirador): Los respiradores (incluidos los N99/P100) se basan en el ajuste, el sellado y la conformidad del usuario. Aumentan la carga de trabajo del trabajador, provocan estrés térmico y ofrecen menor protección que un sistema de captura en la fuente bien diseñado. La captura de la fuente es el principal medio de protección; los respiradores sólo deben utilizarse como último recurso o como reserva.
Ventajas físicas: El humo es el más caliente y tiene la mayor flotabilidad en el arco, lo que facilita su captura. El impulso generado por el calor ascendente facilita el funcionamiento de la capucha antipolvo.
Flujo de aire y consumo de energía reducidos: El caudal de aire necesario para capturar una pequeña cantidad de aire altamente contaminado en la fuente es mucho menor que el necesario para difundir los contaminantes por un gran taller.
Mantenimiento de la calidad del aire: Evita la contaminación de toda el área de trabajo, protege a otros trabajadores y reduce la limpieza/mantenimiento general de las instalaciones.
Requisitos normativos: Las normativas pertinentes (como los límites de exposición profesional de la OSHA para Cr⁶⁺, Mn y Ni) exigen que los empleadores den prioridad a la aplicación de controles técnicos viables. La captura en origen es la regla de oro para cumplir los límites de exposición.
Prevención de enfermedades crónicas: La captura en origen es el método más fiable para prevenir enfermedades debilitantes como la neumoconiosis del soldador (cicatrización pulmonar), la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), el asma ocupacional, los daños nerviosos irreversibles (intoxicación por manganeso), la enfermedad renal crónica y el cáncer de pulmón.
Sostenibilidad: Garantiza la retención a largo plazo de mano de obra cualificada, reduce el absentismo y disminuye los costes sanitarios y de indemnización a largo plazo.
La captura en la fuente no es un extra opcional, sino una línea de defensa fundamental contra los graves y probados riesgos para la salud de la soldadura. Aunque el equipo de protección personal y la ventilación general también desempeñan un papel, sólo la captura en origen puede eliminar de forma proactiva las sustancias peligrosas antes de que entren en la zona de respiración del soldador. Invertir en un equipo de captura en origen adecuado es invertir en la salud de los empleados, el cumplimiento de las normas y la eficacia operativa.