En el proceso de fabricación de las baterías de iones de litio intervienen materiales nocivos como el plomo y el cadmio. Éstos generan polvo y humos tóxicos, lo que supone un riesgo para los trabajadores y la calidad de la producción. Por tanto, es fundamental contar con un sistema fiable de colectores de polvo. Captura los contaminantes en cada paso, garantizando un entorno seguro y un funcionamiento sin problemas.
（1）Proceso de mezcla
Durante la alimentación y descarga de ingredientes, se generan grandes cantidades de polvo fino. El sistema colector de polvo se dirige específicamente a los puertos de alimentación y descarga. Extrae rápidamente el polvo para evitar la contaminación del entorno de producción y proteger la salud de los trabajadores.
（2）Corte y corte longitudinal
El corte por láser de las bobinas de electrodos produce polvo metálico y humos de oxidación. Las máquinas de corte longitudinal dejan residuos que perjudican a los equipos y a la calidad de las baterías. En este caso, el sistema colector de polvo se centra en las posiciones de la cortadora y el cepillo del rodillo, eliminando los residuos de forma eficaz.
（3） Laminación y soldadura
El apilamiento de electrodos y separadores en la laminación genera polvo. La soldadura por láser o ultrasonidos de lengüetas de celdas genera óxidos metálicos. El sistema de captación de polvo actúa de inmediato, evitando daños a los componentes y lesiones pulmonares al personal.
（4） Bobinado y embalaje
En las baterías cuadradas, el polvo se forma en las escobillas de polvo y en las zonas de bobinado del eje principal. Las baterías cilíndricas producen humo y virutas en las cajas de polvo, las soldaduras de los polos y las posiciones de corte. Durante el embalaje, la soldadura láser de las carcasas libera humos. El sistema colector de polvo cubre estos puntos, superando a la limpieza manual en comodidad y minuciosidad.
（1） Cumplimiento de las normas medioambientales
Las nuevas tecnologías de fabricación de Li-ion se enfrentan a estrictos requisitos de protección medioambiental. Un sistema de colectores de polvo garantiza el cumplimiento eliminando eficazmente los contaminantes nocivos.
（2） Mayor eficiencia de la producción
Al evitar la acumulación de polvo en los equipos, el sistema reduce las necesidades de mantenimiento y prolonga la vida útil de las máquinas. Esto minimiza el tiempo de inactividad y aumenta la productividad general.
（3）Garantía de la seguridad de los trabajadores
El polvo y los humos tóxicos se eliminan en origen. Así se reducen los riesgos para la salud y se crea un lugar de trabajo seguro que mejora la permanencia de los empleados.
Opte por sistemas con filtros ultraeficaces (como filtros HEPA) para capturar partículas finas. Asegúrese de que están adaptados a puntos de polvo específicos, como puertos de mezcla, estaciones de soldadura o zonas de bobinado. El modelado profesional de la instalación garantiza un rendimiento óptimo, como el que ofrecen proveedores experimentados como Moland.
Un sistema de colectores de polvo de alta calidad es indispensable para la fabricación de baterías de iones de litio. Aborda los riesgos del polvo en todas las fases de producción, desde la mezcla hasta el envasado. Al invertir en el sistema adecuado, las plantas protegen a los trabajadores, cumplen las normativas y mantienen operaciones eficientes. Confíe en soluciones profesionales para mantener su producción de Li-ion limpia y segura.
